Reflexiones desde la ventana

1er trimestre

«Hemos terminado el trimestre como auténticos/as guerreros/as, los aplausos se verán con un 2021 recontando cicatrices tras vencer todas las adversidades»

Jesús Bermejo Bermejo

Martes, 22 de diciembre 2020, 09:21

Todas las mascarillas se camuflan entre colores mientras se escapan las voces y un griterío de primera hora. Ya se han abierto las puertas y el conserje termina de higienizar la entrada. Un niño está en la esquina y no responde a los buenos días, los ojos no hablan, piensa. Salgo con mi termómetro digital y reparto ráfagas rutinarias con verdes resultados. Las últimas hojas de los arces se aferran a su tronco, vestigios de una primavera confinada y un otoño/invierno en el que no podemos gesticular.

Publicidad

Por eso la humedad cabalga a sus anchas, por eso todo es más gris, porque los sentimientos no se encuentran en las escaleras y los 'grupos burbujas' trepan sin mirarse, como equipos que evidencian sus hostilidades en el campo de juego.

La mochila pesa más de treinta kilos y hay que subir dos pisos. A menos cinco ascienden para no cruzarse con los Sextos que, con su altura, los destronan del vidrio en el que se cuela la luz de la esperanza, paralela de esta niebla que no cesa. Gel y mascarillas, armas de combate. Me niego a comprarme un micrófono poniendo a prueba la fuerza de mi garganta. Las ventanas están abiertas constantemente, con la corriente de aire y el ruido de los coches surcar las rotondas mientras los conocimientos (y el frío) deambulan por el aula. Lápiz en mano; matemáticas, divisiones; lengua diptongos e hiatos; ciencias sociales, la hidrosfera; naturaleza, los animales invertebrados… se quedan embobados con la explicación de la ruta de la seda, una ruta que sería difícil hacer con un confinamiento o toques de queda o fases; un viaje homérico, aplazado en la esperanza, cobijado en el sueño de los/as luchadores/as que me escrutan desde sus pupitres.

Siempre mirando hacia delante, a principios de curso el vaticinio era catastrófico; las expectativas eran nulas; no nos daban ni tres semanas. Pero ahí estamos, día a día, clase a clase, todos juntos, solo gesteando con los ojos. Este presente ajado no impide la risa invisible y el aprendizaje construido en los estratos de un mundo incierto. Lienzos sobre el que asomarse y aprender, a su vez, a convertirnos en mejores personas o, al menos, a no ser peores de lo que éramos. A no caer en la ceguera nebulosa de esta prueba tan lenta que nos provoca tanta angustia.

Hoy llueve, el aula es un lugar de juego donde no se puede compartir, un habitáculo convertido en fortín donde es imposible no rozarse; las mochilas se enzarzan en duelos amistosos cuando, por su peso, chocan. La merienda se toma al lado de la ventana y las bocas, por fin descubiertas, rezongan costumbres que estamos olvidando: la risa de un niño/a, el desarrollo de sus dientes, el despertar de su motivación, la necesidad de ayuda en su cara… todo hay que averiguarlo mientras nos conformamos con la mirada de la mitad de nuestros rostros; algo que nos aleja y marchita nuestros sentimientos.

Publicidad

No hay huida, ya no somos los mismos, la herrumbre de este año acoge el lento porvenir que nos empeñamos en rescatar. Como un desafío, cantamos, a segunda hora, a los de Cuarto B cuando salimos a Educación Física y ellos/as no la devuelven a penúltima. Las burlas sin malicia se esconden acompasadas del ruido de sus manos en las mesas. Compañeros de celda que, desde la distancia, navegan por nuestro mismo mar. Este océano donde los naufragios se convierten en ausencias y sillas vacías.

Hemos terminado el trimestre como auténticos/as guerreros/as, los aplausos se verán con un 2021 recontando cicatrices tras vencer todas las adversidades. Cuando invoquemos lo vivido y resolvamos todos los enigmas. Cuando tengamos la certeza de que el futuro sigue siendo nuestro…

Publicidad

A mis alumnos/as de 4ºA del CEIP 'Dulce Chacón' de Cáceres y a María, su profe de prácticas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

PRIMER MES GRATIS. Accede a todo el contenido

Publicidad