Sale a licitación la reforma de la Oficina de Turismo

Uno de los temas de debate en el último año ha sido la reforma de la Oficina de Turismo, que se tuvo que parar debido al mal estado de la estructura de sus techos, intervención que no estaba contemplada inicialmente. Ante esta situación, se ha demandado en varias ocasiones el apuntalamiento de estas dependencias para la retirada del vallado situado en la parte de arriba de la plaza Mayor para evitar posibles peligros. Todo ello ha generado polémica. Ahora, se ha dado un paso para ejecutar las mejoras necesarias.

El Ayuntamiento ha sacado por fin a licitación la obra para la reestructuración horizontal de esta oficina y los locales colindantes, por un valor de casi 120.000 euros, impuestos no incluidos. Las empresas interesadas tienen hasta el 1 de diciembre para presentar sus ofertas. Al día siguiente, se darán a conocer las propuestas económicas. También se tendrá en cuenta el plazo de ejecución ofertado, que, como máximo, debe ser de tres meses.

Según se detalla en el pliego de condiciones, esta obra es esencial, ya que el forjado del techo de estas dependencias municipales está «en muy malas condiciones, lo que supone un peligro de colapso». Por tanto, se plantea su sustitución para garantizar la seguridad y operatividad de los locales, asegurando así el adecuado funcionamiento del edificio. «Esta mejora es crucial para ofrecer un servicio de calidad a los visitantes, contribuir al desarrollo turístico y aumentar el atractivo de la plaza Mayor de Trujillo. Además, optimiza el uso del edificio y preserva su valor como activo municipal clave», se indica en las cláusulas administrativas. La idea es que se mantenga el sistema estructural, con las mejoras pertinentes. Estas instalaciones tienen una superficie construida de 331 metros cuadrados.

Como el techo de la Oficina de Turismo da a la parte de arriba de la plaza Mayor, será necesario levantar la pavimentación actual, así como su impermeabilización, con el fin de reponerla, junto a un nuevo aislamiento.

Con este planteamiento, el proyecto contempla trabajos de demolición, así como de construcción de cubiertas y estructuras de cerramiento, entre otros. No obstante, se destaca la división del proyecto en lotes, ya que de este modo se asegura una coordinación integral y coherente. Además, «el estado actual de las instalaciones requiere una ejecución rápida para evitar daños adicionales y asegurar el funcionamiento seguro del edificio», se especifica en esas cláusulas administrativas.

La situación de la Oficina de Turismo y el vallado existente también ha supuesto el enfado de empresarios de esta parte de la plaza Mayor, debido a que les ha afectado al normal funcionamiento de sus terrazas. Por ello, algunos confían en que estas obras comiencen en enero, una vez que pasen las navidades.

• Temas
• Trujillo