Las obras de Herreros y San Francisco causan cambios en algunos itinerarios urbanos

Las obras en la calle Herreros y la plazuela de San Francisco, sin duda, no pasan desapercibidas, entre otros motivos, porque suponen dos arterias principales de acceso a la plaza Mayor y la parte antigua. Por tanto, conductores deben buscar alternativas para acceder al centro.

Ya, el alcalde, José Antonio Redondo, reconoció, hace unos días, que las actuaciones iban a suponer unas molestias importantes, porque se han tenido que abrir a la vez Herreros y San Francisco, para conectar las tuberías, porque había presión en esos tubos. «Hemos tenido que abrir más de la cuenta», especificó, aunque matizó que no había más remedio. Por su parte, el edil de Obras, Raúl Gómez, considera que, con las actuaciones terminadas, darán aún más valor a esta calle y, por tanto, a sus negocios. Recuerda que, entre otras mejoras, se eliminarán las aceras en diferente cota de la calzada, para mejorar la accesibilidad.

Para evitar cualquier incidente, la empresa adjudicataria tiene toda la zona con vallas. Ante esta situación, el edil detalla que los ciudadanos deben cambiar algunos itinerarios ya tradicionales. Ejemplo de ello es que se ha dejado un espacio para acceder desde la calle La Guía a lugares como la iglesia de San Francisco, la biblioteca municipal y Cáritas Trujillo. No hay otra forma para llegar si no es a través de la obra. Asimismo, se ha dejado acerado para poder entrar en diferentes negocios de esta zona de la ciudad.

Además, mientras duren los trabajos, como el tráfico está cortado, se ha permitido que los vecinos de la calle Sola puedan acceder en sentido contrario desde la calle Encarnación. Esta misma medida pasa en la calle Chica, que se puede acceder desde Margarita de Iturralde, según se informó desde la Policía Local.

A pesar de las medidas tomadas, esas molestias están presentes, no solo porque los operarios comiencen su trabajo a primera hora de la mañana. Algunos ciudadanos consideran que el paso que se ha dejado es algo estrecho, sobre todo, para personas con movilidad reducida. También han echado de menos que estas actuaciones no se hayan llevado a cabo meses atrás, cuando había menos público en la población y no ahora en agosto.

Con todo ello, las obras continúan su marcha con normalidad, con el objetivo de proceder a cambiar las canalizaciones de saneamiento y abastecimiento, además del firme, que irá adoquinado. La maquinaria sigue actuando abriendo la calle para proceder a los oportunos trabajos, ante la atenta mirada de responsables y algunos curiosos.