La escuela municipal de fútbol base apuesta por un proyecto de largo recorrido

La asociación Escuela Municipal de Deportes, promovida por el Ayuntamiento, echó a andar esta última temporada para hacerse cargo del fútbol base trujillano. Antes de arrancar un nuevo curso, se ha hecho balance de la labor llevada a cabo. Su coordinador, Carlos Paredes, se muestra satisfecho de la gestión, tanto en el ámbito económico, como social y deportivo. Destaca el apoyo de la concejala de Deportes, Gema Bernat, y del coordinador de esta delegación, Antonio Retamosa.

A pesar de ello, Paredes apunta que hay que seguir mejorando. Considera que este año se han puesto los cimientos de un proyecto «bonito», que debe ser de largo recorrido, donde se formen jugadores y personas.

Esta entidad ha dirigido, hasta ahora, los equipos desde benjamín hasta cadete, bien en fútbol 8, bien en fútbol 11. En total, se ha contado con unos 125 menores, dirigidos por once entrenadores. Entre los éxitos, se ha conseguido que el equipo infantil suba de categoría a Primera Autonómica Judex. Paredes sostiene que, otro de los objetivos superados ha sido la formación de todos los entrenadores, a través de la Federación Extremeña de Fútbol. De hecho, se celebró en Trujillo uno de los cursos. Ahora, la intención es que estos responsables continúen formándose hasta conseguir los tres niveles existentes, destaca el coordinador.

El trabajo, durante la temporada, ha estado planificado según las categorías. Los más pequeños, con el fútbol 8, se han centrado sobre todo en aspectos de iniciación, como la coordinación, el espacio y el balón. A partir de infantil y hasta cadete, esa labor ha estado dirigida hacia la especialización de este deporte. En las sesiones, ha estado muy presente la educación en valores, como el compañerismo y el trabajo en equipo, señala Carlos Paredes.

Nuevo reto

Ahora, ya se piensa en la nueva temporada, con aspiraciones nuevas. Este responsable detalla que se incorporarán dos categorías nuevas, como es la femenina y la juvenil. Esta nueva apuesta se debe a que hay menores en esas categorías dispuestos a integrarse en la escuela. Entre otros retos, con esos adolescentes, se intentará continuar con su aprendizaje y que se diviertan dentro del campo.

De igual forma, destaca que, gracias a la formación que han tenido los entrenadores, podrán desarrollar mucho mejor su trabajo dentro y fuera del terreno de juego, lo que redundará en los pequeños.