Aspace Cáceres consolida su centro de Trujillo pensando en nuevos proyectos

Un ejemplo del buen funcionamiento del centro de discapacidad de Trujillo, gestionado por Aspace Cáceres, se vio el pasado viernes, con la fiesta de Navidad, donde compartieron una tarde usuarios, familiares, trabajadores, directivos y responsables municipales. Los propios usuarios fueron los protagonistas con la puesta en escena de una obra de teatro y la interpretación de un villancico. También los padres recibieron un regalo de sus hijos.

Así lo destacó la gerente de la entidad, Ruth Gómez. Insistió en que es el culmen a un año de mucho esfuerzo y trabajo por poner en marcha este proyecto. A pesar de las dificultades, ha sido muy gratificante. Gómez reconoce que se comenzaron con muchas cosas heredadas y para poder establecer su filosofía de trabajo, ha costado, pero poco a poco se va consiguiendo. Insiste en que uno de los mejores termómetros del funcionamiento del centro es que los usuarios llegan y se van contentos del centro, añade.

En la actualidad, se cuenta con el servicio de centro de día, con cinco personas, con los que se trabaja diferentes habilidades . Además, se tiene el centro ocupacional, con 22 usuarios, que son los que tienen más autonomía. Es como si fuera la antesala a una formación laboral plena. A partir de ahí, se llevan a cabo una serie de talleres en los que se enseñan unas habilidades para desarrollar una tarea. En este caso, se cuenta con carpintería, manualidades, así como el de jardinería. También se dispone de un huerto de ocio en el parque de San Lázaro cedido por el Ayuntamiento. Gómez apunta que, igualmente, se trabajan otros aspectos para que, en su día a día, sean más independiente y tengan mejor calidad de vida. Destaca que los profesionales del centro trabajan el potencial de cada chico y chica, con una atención muy individualizada.

Esta responsable sostiene que este proyecto es el resultado de la suma del esfuerzo de muchas personas. Detalla que la junta directiva de Aspace Cáceres apostó por esta propuesta, al ver que había que cubrir una necesidad. También pone en valor el grupo de profesionales existentes, que se han involucrado en esta iniciativa. Asimismo, reitera que la ciudad trujillana se ha volcado, desde la Administración local, hasta los vecinos.

Futuro

Ahora, la pretensión es consolidar lo que se tiene. También se pretende afianzar los lazos con la comunidad trujillana. En un futuro próximo, se pretende acreditar los servicios de atención temprana y habilitación funcional. Estamos intentando solucionar los trámites burocráticos. La idea es que estos servicios estén en marcha en 2017. Reconoce que existe la necesidad y así se lo ha transmitido algunas familias. Otro de los retos para esta organización es la apertura de la residencia. En este caso, es un proyecto a largo plazo, ya que se necesita financiación.