La Junta inicia la recuperación del tramo de muralla caído en abril

La ciudad trujillana sufrió en el mes de abril el derrumbe de un tramo de muralla junto a la explanada del castillo, debido a la acumulación de agua por las fuertes lluvias de esos días. Tras algo más de siete meses de ese incidente, la Junta de Extremadura, a través de la Consejería de Cultura, han comenzado los trabajos de recuperación de ese lienzo caído, según señalan fuentes de la Administración regional, en una nota de prensa.

Ese derrumbe afectó a un tramo de 6 metros lineales y 8 metros de altura, situado en la coracha meridional de la barrera exterior de la alcazaba. El presupuesto destinado para este proyecto es de 46.500 euros y se prevé que se pueda ejecutar en un plazo estimado de dos meses. Por tanto, a principios de enero debería estar acabado.

Las actuaciones principales se centrarán en la limpieza, consolidación y restauración de la zona afectada. Para ello, se procederá a la retirada de escombros y la limpieza de la vegetación, reutilizando toda la mampostería original de la muralla. Además, se realizarán inyecciones de cal hidráulica para consolidar el terreno y prevenir futuros desplomes, se indica en el escrito.

La restauración respetará las características originales del tramo derrumbado, utilizando documentación fotográfica para la recomposición de los elementos desaparecidos, como los merlones y los mechinales. Asimismo, se repondrá el cableado del alumbrado público y se reparará la solera del adarve. «Estas obras, además de recuperar el valor patrimonial de la muralla, contribuirán a la conservación preventiva y el correcto mantenimiento de una de las joyas arquitectónicas de Extremadura», se añade en la nota de prensa.

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