José Antonio Bermejo deja la Jefatura de la Policía Local

Este agente explica que ya, cuando estuvo José Luis Bermejo como subinspector jefe, ejerció como segundo en la plantilla policial. «Compartimos las responsabilidades», apunta. Sin embargo, desde que cogió las riendas de este servicio, asevera que esa responsabilidad ha recaído en una sola persona, sin que tuviera a nadie para sustituirle en determinados momentos o días libres. Esta situación, junto a otros inconvenientes, además de algunas dolencias físicas que sufre, ha hecho que tomase la decisión de pedir, hace ya unos meses, esa segunda actividad.

Bermejo reconoce que uno de los problemas existentes para la Jefatura de Policía es la falta de personal, que provoca que sea complicado hacer los cuadrantes para cubrir los servicios, teniendo en cuenta los derechos del personal. El número de agentes de la plantilla, en la actualidad, está muy lejos de los 18 policías, más el jefe, que había cuando él entró.

Asimismo, pone de manifiesto que «estos últimos años han sido duros». Apunta la situación vivida con la pandemia y el confinamiento. También se acuerda de la cumbre hispano-lusa, que llevó aparejado una serie de protocolos que se iban cambiando cada día. No se olvida de los rodajes de películas y series como 'Juego de Tronos', con la aplicación de diferentes medidas. Todo ello se ha unido al día a día, además de que ha habido problemas con el Consistorio.

A pesar de las distintas situaciones vividas a lo largo de estos años, alguna de ellas complicada, asegura que puede mirar de frente a los compañeros, ya que, con todos ellos tiene una buena relación. También se acuerda de la labor realizada con el resto de policías desde que inició su actividad como agente. «Me quedo con la satisfacción personal de haber cumplido con mi deber porque yo creo que lo más bonito es trabajar para los demás y solucionar sus problemas».

Aunque Bermejo deja de estar al mando de esta jefatura, continúa, con uniforme, en otras tareas. Ahora es la persona que dirige el negociado de sanciones. «Se trata de llevar a cabo la instrucción sobre las denuncias que formulan los agentes locales vinculadas a las ordenanzas municipales». Están relacionadas, sobre todo, por temas de urbanismo, por miccionar en la vía pública o por tenencia de escopetas o pistolas de aire comprimido sin licencia. Igualmente se refieren a la ocupación de vía, terrazas o, incluso, ruido en locales, entre otras. «Cualquier denuncia debe ser instruida debidamente y debe haber una persona que medie entre la denuncia tramitada y el denunciado».

Bermejo matiza que las instrucciones de sanciones al reglamento general de circulación son instruidas por parte del Organismo Autónomo de Recaudación y Gestión Tributaria (OARGT). Son las relativas a la falta de documentación, velocidad y aparcamiento, entre otras. Por tanto, desde la oficina de Policía se manda al OARGT.

Desde esta segunda actividad, también desarrolla otras labores, como cuestiones administrativas relacionadas con el control del mercado de abasto, así como de obras en la ciudad.

José Antonio Bermejo lo que tiene claro es que «me siento policía y siempre me sentiré policía».