La Feria del Queso recibe visitantes nacionales y de países como Estados Unidos y Uruguay

Dos de ellos llegaron de Estados Unidos, previo paso por tierras griegas. La pareja de novios Tanzim y Nadia quisieron celebrar su segundo aniversario en un certamen quesero. Él, con un particular castellano, explicó que su novia está dando clases de inglés en Grecia. Por tanto, la fue a visitar. A partir de ahí, buscaron por Internet la feria más grande del mundo, lo que les llevó a Trujillo. Reconocen que se han quedado sorprendidos de la muestra. «Me gusta mucho, nunca había visto algo como esto», señalaban estos jóvenes. Entre sus preferencias, el queso

Poco después de abrir el recinto ferial, también llegó Daniel Burguiñan, procedente de Madrid, aunque con casa en Trujillo, junto con Natasha González, natural de Uruguay, que era la primera vez que visitaba el certamen quesero. «Me han dicho que hay mucha gente y muchos quesos», sostenía nada más entrar al recinto ferial. Matizaba que en su país también tienen un buen queso. La idea de esta pareja era disfrutar de la jornada en Trujillo para regresar el domingo a Madrid. De la comunidad madrileña fueron muchos los participantes en el certamen.

Según fueron pasando las horas, se fue llenando el recinto ferial. Algunos de los visitantes llegaron atraídos por familiares que, cada vez que pueden, vuelven a su tierra. Es el caso de un matrimonio procedente del País Vasco. No obstante, la mujer es de Sierra de Gata. «A mí me tira mucho la tierra». A pesar de ello, era la primera vez que disfrutaban de la feria trujillana. Su intención también era hacer algo de turismo por la ciudad.

La multitud de visitantes, de muy diferentes edades, llegaron no solo en coche, sino en autobuses fletados para la ocasión. Ejemplo de ello fue la excursión organizada en la población toledana de Torrijos, con un autocar con unas 60 personas. Salieron a las 8.30 horas de la mañana y llegaron a la ciudad trujillana a las 11.45, previa una parada en mitad del camino. «Nos parece una feria muy bonita con una gran variedad, con sabores característicos. La variedad de España es la variedad de la muestra», señalaban María Eugenia López y Juan Pablo Díaz, que ya llevaban varios quesos probados. Por la tarde, sobre las 19.00 horas tenían prevista la vuelta a su localidad.

Una de las visitantes echó de menos quesos sin lactosa, ante la proliferación de esta intolerancia. No obstante, al menos en uno de los expositores había un cartel para que pudiera degustar alguna variedad.