Feliz Navidad

Ya se van acercando esos días que a los que algunos no les gustan nada, con la frase : «Ojala me acostara y al levantarme fuera 7 de enero». Cuando preguntas ¿por qué? Te dicen porque ya en nuestra mesa falta familia.

Lo siento por ellos, en mi mesa también falta familia y familia principal, pero a mí me encanta la Navidad, me gustan los adornos, el bullicio de la gente comprando de un lado a otro, los villancicos sonando, el Papa Noel y… como no, los Reyes.

Me gustan desde que era niña y las disfrutábamos con mis padres, mis tíos y toda la gente del pueblo. Ellos hacían una hoguera y al salir de la misa del gallo nos reuníamos allí, eso sí, después de una cena todos juntos, abuelos tíos y primos. ¡Cuántos recuerdos maravillosos!

Según iba pasando la noche, los vecinos de Belén iban pasando por la lumbre, cantando romances, villancicos y todo acompañado por los dulces típicos y las copitas.

Vuelvo a repetir que lo siento por ellos. Soy muy feliz en día de Nochebuena, preparando la cena, bueno, lo que me ha tocado hacer y, sobre todo, soy muy feliz pensando que esa noche voy a disfrutar de la compañía de mi madre, mi hija y todos mis hermanos y sus familias. Me gustaría que os lo imaginarais con veintitantos con diferentes edades, opiniones e ideologías, un caos, pero ¡Maravilloso caos!

¿Y que os voy a decir de los Reyes? La primera en levantarse e ir a ver lo que los de Oriente han dejado soy yo ¿infantil, tonta? Llamadme cómo queráis, me da lo mismo con mi edad aún tengo esa ilusión, porque lo mejor de todo es que nunca sé lo que me van a dejar, pero algo útil siempre cae. Y es que estos Magos son muy sabios.

Ahora os preguntaréis ¿por qué esta pesada nos cuenta todo esto? fácil, este año no habrá muchas de estas cosas, no habrá cena, no podremos juntarnos todos ni siquiera algunos, cantaremos villancicos cada uno en su casa, si hay ganas con lo que nos está cayendo,

Este año sí será una Navidad triste. No podremos juntarnos todos los hermanos, como hicimos el año pasado, pero nos queda la alegría de estar todos vivos, que es lo principal, vivos y bien.

Añoraremos las pasadas Navidades y pediremos al año nuevo, salud para poder celebrarlo como Dios manda el próximo año, que podamos disfrutar de nuestras familias, amigos y compañeros. Aunque con mucha antelación FELIZ NAVIDAD para tod@s, cuidaros muchísimo, que la vida no es fácil, pero es muy hermosa y es el mejor regalo que Dios nos ha hecho. Os quiero.