Ecologistas en Acción muestra su rechazo ante una nueva planta solar fotovoltaica

Ecologistas en Acción de Extremadura ha interpuesto un recurso de alzada ante el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) contra la autorización de la planta solar fotovoltaica 'SPK Trujillo', promovida por la empresa Solarpack. La resolución fue publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Cáceres el pasado 4 de julio. Así lo detalla la plataforma cívica Salvemos el Berrocal, a través de una nota de prensa.

«La instalación de esta planta, tal como ha sido autorizada, vulnera principios básicos del derecho ambiental español y europeo y atenta contra la conservación de la biodiversidad en una de las zonas con mayor valor ecológico de Extremadura», se detalla en el escrito.

Esta planta contará con una extensión de 427 hectáreas y más de 260.000 paneles solares. Está proyectada en el término municipal de Trujillo, a cinco kilómetros del núcleo urbano.

«Ecologistas en Acción de Extremadura solicita la revocación de la autorización de la planta, la suspensión de sus efectos para evitar perjuicios irreparables al patrimonio natural y el acceso al expediente completo y actualizado del proyecto, incluyendo todos los informes técnicos y de compatibilidad urbanística», se indica en el escrito.

La organización ecologista argumenta que la autorizacióń presenta graves deficiencias de legalidad material y procedimental. Entre las principales irregularidades denunciadas está una evaluación de impacto ambiental desactualizada y deficiente, ya que se considera que «la evaluación de impacto ambiental se realizó́ sobre un proyecto anterior y sustancialmente diferente al autorizado».

También hay una amenaza para especies protegidas en zona de alta sensibilidad. En el escrito igualmente se detalla que existe una incompatibilidad urbanística y presunta ilegalidad. «El recurso también denuncia que el proyecto se ubica en Suelo No Urbanizable Protegido (SNUP), superpuesto o muy cerca de espacios de la Red Natura 2000 (Riberas del Almonte y ZEPA de Magasca). Este tipo de suelo solo permite usos excepcionales ligados a la conservación o actividades agropecuarias tradicionales, no implantaciones industriales de esta magnitud», se explica.

Todo ello se une a la falta de evaluación de impacto acumulativo: «No se ha realizado una evaluación adecuada del impacto conjunto con otras numerosas plantas solares ya en funcionamiento o en proyecto en los alrededores de Trujillo».

«Desde la Plataforma recibimos con esperanza la presentación de este recurso, pues muchos vecinos de la localidad nos han trasladado su preocupación por la construcción de una nueva planta fotovoltaica, especialmente algunas personas que se dedican al turismo ornitológico y que conocen bien la zona y su riqueza e importancia para las aves», detallan en la nota. Asimismo: «Entendemos la importancia de la transición ecológica, pero consideramos que se está́ perdiendo el equilibrio entre el desarrollo de energías renovables y el respeto a nuestro patrimonio natural y paisajístico», se añade desde la plataforma Salvemos el Berrocal.

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