Los datos de coronavirus en la ciudad empeoran en la última semana

Desde el inicio del estado de alarma y del confinamiento, la ciudad trujillana ha contado con una situación «optima» en relación a la crisis sanitaria. Así lo manifestaron los dirigentes políticos principalmente, en las primeras semanas. Reconocieron que, ante la gran afluencia de turismo que siempre ha tenido la ciudad, era sencillo que hubiese podido haber más contagios.

Finalizada la tercera semana de este estado de alarma, los datos han empeorado. Ya, a principios de semana, se produjo un fallecimiento por coronavirus de un vecino de 93 años. El pasado jueves, hubo que sumar otro deceso por COVID-19, según confirmaron fuentes municipales y sanitarias. Se trató de una mujer octogenaria. Los malos datos, además, provienen del brote de coronavirus surgido en la residencia Santa Isabel (el asilo) en donde se han confirmado cuatro casos, tres de personas mayores del propio asilo y una sanitaria.

Junto a estos casos, desde que comenzó la crisis sanitaria, hay confirmados otros cuatro positivos de diferentes personas. Algunos de ellos pueden estar cerca contar con el alta médica, según señaló el alcalde, José Antonio Redondo, tras la comisión de seguimiento del coronavirus, el pasado jueves.

Además, existen diferentes personas en cuarentena, bien porque tienen síntomas de coronavirus, bien porque han estado en contacto con algún caso positivo. Ahora, habrá que esperar cómo evoluciona la pandemia en la ciudad en esta próxima semana.