José Cercas JESÚS M. AVILÉS
Reflexiones desde la ventana

Mi corazón es una dehesa

JOSÉ CERCAS

Domingo, 20 de junio 2021, 04:07

A la dehesa de Santa Ana, capital extremeña del cochinillo asado.

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MI CORAZÓN ES UNA DEHESA

Mi corazón es una dehesa despoblada de filantropías,

de hojas caducas que, con su verde y heroico léxico,

claman por los ojos abiertos de las estaciones.

Mi corazón es una dehesa llamada cielo

y un pájaro que trina en sus capítulos de aire.

Mi corazón es una dehesa que vuela

sobre los collados y el agua leve del río,

Mi corazón es el tiempo que monta su equipaje sobre las flores.

Mi corazón es una dehesa que tiene frío y abriga la escarcha,

llora y pena como una cigüeña dormida en la torre.

Mi corazón es una dehesa que oye cantar los lirios

y a los jabalíes que hociquean su savia oculta.

Mi corazón es una dehesa que canta en días de niebla

y abraza silente al violento paso del tiempo.

Mi corazón es una dehesa que labora

en la callada razón de la aventura.

LA DEHESA

He caminado, tantas veces, por esta dehesa,

he visto, tantas veces, como la humedad

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enerva el tronco de la encina.

Cuantas veces he oído el graznido de un cuervo augurando,

en la rama más alta, su pronta singladura.

Cuantas veces te he sentido vestida de otoño,

buscando en los años la voz perdida de la niebla,

el triste lamento de una palabra.

Te pretendí grave como los días de lluvia,

hoja perenne de los encinares,

grana que busca su néctar en la tierra,

tallo que se aferra a la existencia.

He caminado, tantas veces, buscando tu nombre,

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que apenas hoy, me atrevo a pronunciarlo.

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