La ciudad cuenta con cinco elementos incluidos en la Lista Roja del Patrimonio

La mala es que tampoco han salido ninguno, al menos recientemente. En total, la ciudad trujillana ha comenzado 2021 con cinco elementos en esta Lista Roja del Patrimonio. El último en incorporarse fue en febrero del año pasado. Se trató del palacio del siglo XV del Carneril de los Llanos fundado por la familia Chaves. Se encuentra en continuo estado de ruina, según la institución. Hace un año también se incluyó el Convento de los franciscanos descalzos alcantarinos, más conocido como de la Magdalena. Fue construido en 1603. En este listado se resalta igualmente que amenaza derrumbe.

En marzo de 2019, fue incluido el berrocal trujillano. En ese momento, se indicaba que en los últimos años «ha venido sufriendo diferentes impactos, al verse afectado por una serie de procesos económicos que han comenzado a dañar la calidad de su paisaje cultural y su conservación». Asimismo, se hacía alusión al incumplimiento de las medidas correctoras atenuantes del impacto ambiental, y visual ocasionado por el parque fotovoltaico y las líneas eléctricas de evacuación.

Otro elemento que permanece en esta Lista Roja desde julio de 2013 es la ermita de Santa Ana en continuo deterioro. También está la casa rectoral de Santa María desde 2009. En ese momento, se detallaba que «es lamentable que en el Trujillo medieval, restaurado y bien conservado, que aspira a ser declarado Patrimonio de la Humanidad, exista todavía un caso como este de total abandono».